CCTV o Cámaras CCTV.
En resumen es la posibilidad de ver en una pantalla múltiples lugares en tiempo real permitiendo tener un panorama general de lo que acontece en el área que se quiere vigilar.
Existe grandes avances en el área de cámaras de videovigilancia que hacen completamente obsoletas las tecnologías que hasta hace un par de años dominaban y esto se debe a la introducción de la interconexión de estos equipos a internet, la alta definición de video y al almacenamiento remoto de grabaciones.
Aunque casi todas las cámaras de vídeo se ajustan a la definición de CCTV o videovigilancia, el término se aplica más frecuentemente a los utilizados para la vigilancia en las áreas que pueden necesitar supervisión, tales como bancos, casinos, aeropuertos, instalaciones militares, y tiendas de conveniencia.
En las plantas industriales, equipos de CCTV puede ser utilizado para observar partes de un proceso de una sala de control central, por ejemplo, cuando el ambiente no es propicio para los seres humanos. Los sistemas de CCTV pueden funcionar continuamente o sólo cuando sea necesario para controlar un evento en particular. Una forma más avanzada de circuito cerrado de televisión es utilizando grabadoras de vídeo digitales (DVR) con una variedad de opciones de calidad, rendimiento y características adicionales (tales como detección de movimiento y alertas vía correo electrónico).
La alta definición se ha vuelto un estandar de calidad mínima y ayuda a tener grabaciones con una calidad asombrosa a costos razonables ya que hace algunos años implicaban inversiones que solo grandes empresas podían pagar.